Blogia
ateo poeta

 

Podrías ser adorable como el trino

y los caballos sin arneses refulgiendo

al poniente con su negro azabache.

 

Las hojas de té precisan ráfagas

de emulsión y soledad

antes de que bajen sus cadáveres

al fondo del tiempo.

 

He interrogado sin éxito por qué

toda minería depara

una vida triste y el oro

de los artificios pierde,

en suma, su valor.

 

Podrías igualar a la madera noble

y sabia y húmeda y longeva,

podrías confundirte con el ósculo

del infinito y con la música

de los espectros,

y la savia de tus pechos podría

endulzar, sin un solo abalorio,

las amarguras.

 

Lo que no entiendo es por qué

se prolongan la escarcha

y el hermetismo.

 

0 comentarios