Blogia
ateo poeta

 

Hay poemas que adoro

y poemas que aborrezco.

 

No hay lugar

para medias tintas.

 

O pocas veces

(y entonces dudo

de su contribución

al género).

 

Lo peor acontece

cuando mi yo sujeto

y mi yo objeto

se enzarzan

en idénticas

disquisiciones.

 

 

Ilustración: Wendy Macnaughton

 

 

 

0 comentarios