Blogia
ateo poeta

 

Y aunque en el envés, latente, savia,

a un tren de separación, musical y cumbre.

 

Y no importa cuán lejos estén el absoluto

y el horizonte o el término medio

y el paraguayo a morder.

 

La tilde diacrítica, el flujo del sueño, el cuerpo

de ola, la versatilidad, un cierto concepto

de lo inteligible.

 

Y por más que se congreguen los colibríes

y obtengan su carta de residencia

los futuros y probables amantes.

 

Hay una configuración de ti

que celebra y nutre y aplaca

los accidentes del destino.

 

 

Fotografía: Ash Thayer

 

 

 

 

 

0 comentarios