Puedo hacer
ímprobos esfuerzos
para dejar de extrañar
los lugares hoscos
y los apáticos
aborígenes
que me rodean.
Afinar las dotes
camaleónicas,
reírles sus bromas
inexplicables
y olvidar,
sin vuelta atrás,
cualquier tentación
de añoranza.
Estas recetas
poco me sirven,
sin embargo,
para habituarme
a tu cósmico
silencio.
Fotografía: Alexander Bassano
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