La conversación genuina ocurre
si me desdoblo y repliego y le doy
la justa voz
a la continuidad.
Es a la búsqueda
de ese lúcido eclipse,
fondo subalterno donde hablamos
sin el lastre de la pregunta
a cada respuesta.
Reconocer la anestesia, el óxido,
lo erradicado.
Qué escasez monstruosa
en la simetría
y aclamar una próspera
cosecha.
Fotografía: Nobuyoshi Araki
0 comentarios