el país de las nubes
si algo aborrezco de las críticas literarias sobre poesía es que no citen poemas enteros, que el comentario se convierta en una letanía ornamental y vacía, que no emerja ni una huella de las subjetividades biográficas de quien escribe, de quien lee, y de sus relaciones, por muy virtuales que sean,
“viaxe ao país das nubes” (editorial Chilacayote, Vigo –supongo-, 2006) es más que un libro de poemas: un relato de viajes en verso y en imágenes sobre la experiencia de su autor colaborando con el CIPO (Consejo Indígena Popular de Oaxaca) y con La Otra Campaña que ha circulado por México animada por el EZLN (Ejército Zapatista de Liberación Nacional),
Manolo Pipas es el autor, un nombre artístico que comenzó como un apodo debido a su afición por cultivar calabazas y llevar habitualmente sus frutos en el bolsillo, que siempre ha defendido hablar y escribir en gallego, y con quien he compartido muchas vivencias en el MOC (Movimiento de Objeción de Conciencia) desde que llegué a Vigo en 1993, y después en otros espacios comunes como aquellos recitales iniciáticos -para mí, al menos- (“a repichoka”) que acontecían tan clandestina y cómplicemente en A Cova dos Ratos,
una persona para mí, pues, entrañable,
en blanco y negro (a excepción de las ilustraciones coloridas y mágicas de Pedro, otro libertario en las mismas redes de afinidad y solidaridad) acompaña un buen puñado de fotografías tiernas y melancólicas que él mismo fue atesorando,
me sorprende de Manolo su progresiva aceptación de los aparatos fotográficos, telefónicos, informáticos, aerotransportadores, él que nunca se olvidaba de portar lápiz y papel, y de mostrarlos con el alarde del hombre primitivo que ha alcanzado las más altas cumbres de la trascendencia, me sorprende que haya llegado a mezclar ese castellano mexicano con su gallego de siempre, militante, con indigenismos crujientes como el maíz, deslumbrantes y enigmáticos, como si fuera uno de esos poetas de la época beat que tan lejos le quedan, me sorprende que siga reacio a las normas ortográficas, a la acentuación, insumiso a las letras mayúsculas y capitales, algunas veces,
y debo decir que me gustan las personas que me sorprenden, y que este libro de viajes o de poemas, o de poemas y de viajes, consigue hacerte, poco a poco, uña y carne con todas esas vidas que lo nutren
2 comentarios
MARTA QUINZÁN -
este verán percorrín un anaco de México cunha amiga. Nunha palapa no medio dun manglar onde me aloxei, no estado de Chiapas, caeu nas miñas mans este libro de Manolo Pipas, e xa non puiden facer outra cousa aquela sobremesa máis que deleitarme coa súa fermosura. Agora gustaríame darllo como agasallo a un amigo e non atopo onde conseguilo. Poderíasme axudar??
Graciñas
valentin -
No me atrevo a hacer yo una glosa tan pensada como la de miguel. Pero si el número de personas que comparten un juicio aún sirve para darle algún valor, permitaseme entonces sumar mis consideraciones a las ya vertidas para mayor empaque del argumento.
De los poemas de manolo recogidos en su, creo que último libro, lo mejor es que me gustan, que me los he leido todos (¡todos!!). Y también que no me parecieron prescindibles; y que me gustó lo que contaba, y como lo contaba y que quise haber estado allí, y que terminé con la sensación de haber estado. Alguna vez me he imaginado a manolo haciendo lo que sería su viaje iniciatico, descubriendo las cosas de esa manera que hace que cuadno vuelves, ni eres el mismo, ni hablas igual, ni te reconoces del todo. Bienvenido a casa pues Sr Pipas.