Dejar de leer
para seguir
escribiendo.
Y a la inversa:
vuelta a la lectura
en cuanto finalizo
de escribir.
Sin solución
de continuidad:
por poco sociable
que pueda parecer.
Sólo cabe indicar
que el resto
de distracciones
han sido plenamente
elegidas.
Ilustración: Casilda García Archilla
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