Se cae el telón
y aparece otro
en el fondo.
Recuerdo
los besos
como rocío,
aquel don
en la mañana.
Abrazar la proximidad
del bosque,
instituir
un fulgor azul
de viento.
La ternura,
después de todo:
una superstición.
Se cae el telón
y aparece otro
en el fondo.
Recuerdo
los besos
como rocío,
aquel don
en la mañana.
Abrazar la proximidad
del bosque,
instituir
un fulgor azul
de viento.
La ternura,
después de todo:
una superstición.
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