Si la atracción por el sexo
es un vicio desenfrenado,
entonces que no se juzgue
sino en los términos
de su propia enfermedad.
Fotografía: María Sánchez
Si la atracción por el sexo
es un vicio desenfrenado,
entonces que no se juzgue
sino en los términos
de su propia enfermedad.
Fotografía: María Sánchez
0 comentarios